Desde hace tiempo el fabricante alemán tiene en el punto de mira a Tesla, el actual líder mundial en el mercado de los coches eléctricos, y quiere cubrir todos los frentes para alcanzar una posición de privilegio cuando arranque la década de 2030. El Grupo Volkswagen es líder de ventas en Europa gracias a la fortaleza de todas sus marcas: Audi, Seat, Skoda… pero sabe que, para lograr un dominio a nivel mundial, es imprescindible sobresalir en el sector más estratégico de los próximos años, el de los vehículos eléctricos.

La marca americana dirigida por Elon Musk tiene previsto alcanzar durante 2022 una producción cercana a 1,5 millones de vehículos eléctricos —en 2021 ya superó las 930.000 unidades— y Volkswagen ya está inmersa en un ambicioso plan con el que ya espera alcanzar una fabricación de 800.000 vehículos eléctricos a lo largo de este año. Sin embargo, su gama ID de turismos (en la que ya se encuadra también la furgoneta ID.Buzz) no es suficiente.

 

Scout EV: para el peculiar mercado norteamericano

Tesla también va a diversificar su gama y cuenta con proyectos incluso en el sector del transporte pesado. Durante 2023, por ejemplo, debería lanzar el Cybertruck, un pick-up eléctrico muy esperado en el mercado norteamericano, donde este tipo de vehículos ocupan los primeros lugares en las listas de ventas. Y otros fabricantes locales, como Ford, General Motors o Rivian, también se están adentrando con todoterrenos y pick-ups en el mundo eléctrico.

Por eso Volkswagen lanzará una nueva marca en Estados Unidos, que se llamará Scout, será administrada por una empresa independiente —según han confirmado— y producirá pick-ups y todoterrenos eléctricos especialmente pensados para los clientes norteamericanos. El objetivo es duplicar la cuota de mercado del Grupo Volkswagen, que actualmente es del 5%, con modelos mucho más asequibles que los Hummer EV, Tesla Cybertruck o Ford F-150 Lightning, para lograr un buen volumen de ventas.

 

Los Scout definitivos llegarían en 2026

Por tanto, Scout sería una marca de futuro, aunque su nombre también rinde un homenaje a la International Harvester que compitió con su Scout, en las décadas de 1960 y 1970, contra los Ford Bronco y Jeep Wrangler. En la década de 1980, los derechos del nombre pasaron al fabricante estadounidense de camiones Navistar, que fue absorbido por el Grupo VW en 2020. Ahora, la nueva compañía se creará con una inversión inicial de 100 millones de dólares, pero posteriormente debería abrirse a inversores externos, institucionales o no, para iniciar operaciones y planificar la comercialización de los primeros Scout para 2026.

International Harvester Scout pick-up 1978

Durante 2023 ya deberían anticiparse varios concepts basados ​​en una plataforma independiente diseñada específicamente para vehículos eléctricos, que mostrarían el ADN de los futuros Scout, con una fuerte vocación todoterreno y un diseño de estilo retro, como muestran los primeros bocetos mostrados por Volkswagen, pues también se busca un aspecto muy estadounidense, que se distancie de la imagen de la marca germana, todavía empañada allí por el «dieselgate».

 

Hasta 250.000 unidades al año

Aún no se sabe en qué fábrica se producirán los Scout, pero según el Wall Street Journal, el grupo VW tiene previsto vender 250.000 vehículos al año de la nueva marca, que también podría lanzarse en otros mercados fuera de Estados Unidos. Tampoco hay que olvidar que el pick-up eléctrico de Scout debería ser de un tamaño parecido al Volkswagen Amarok, cuya nueva generación se basa precisamente en el último Ford Ranger.