Tras más de 3 millones de unidades comercializadas de las cuatro generaciones del Volkswagen Caddy desde su lanzamiento al mercado en 1979, la quinta generación de este modelo llega al mercado con más opciones que nunca, ofreciendo soluciones para todas las necesidades. En concreto, estas son las posibilidades con las que cuenta la gama:

  • Caddy Cargo y Kombi: la “furgo” para autónomos y empresas
  • Caddy Outdoor, Origin y Life: las alternativas que permiten disfrutar al mismo tiempo del ocio y del negocio, es decir, tu coche particular… y para el trabajo
  • Caddy California: para los que buscan un vehículo camper con el que moverse a cualquier lugar.

Y por si fuera poco, en todos los casos se puede elegir dos versiones de carrocería: la corta, con una longitud de 4,5 metro;, o la variante “Maxi”, que alcanza los 4,85 metros.

Volkswagen viene muy bien preparada a un segmento que representa casi la mitad del total de vehículos comerciales que se venden en nuestro mercado. De hecho, en España se han comercializado más de 30.000 unidades del Caddy en los últimos cinco años. Una cifra que supone alrededor del 40% del total de vehículos comerciales que vende Volkswagen.

Hechas las presentaciones, entremos a conocer con más detalle a conocer este nuevo Volkswagen Caddy, para que puedas elegir la versión que más se adapta a tus necesidades.

Volkswagen Caddy Cargo y Kombi: los comerciales

El Caddy Cargo es para el transporte de mercancías, por lo que no cuenta con ventanillas traseras. Tienen una capacidad de carga de hasta 3,1 m3 en la versión corta, y hasta 3,7 m3 en el caso del Maxi, con un espacio interior que permite transportar hasta dos euro pallet. La nueva plataforma también hace posible montar una puerta corredera más grande, mejorando el acceso a la zona de carga.

En cuanto al Caddy Kombi, destinado al transporte de pasajeros, sus acabados y la presentación interior no es tan cuidada como en las versiones destinadas a particulares. Lo más interesante es que, independientemente de si la carrocería es larga o corta, puedes equipar una tercera fila de asientos y contar con siete plazas. Además, en el mejor de los casos, con cinco plazas y cargando hasta la parte superior del respaldo de los asientos traseros, el volumen del maletero supera los 1.200 litros. Eso es… ¡más del doble que un monovolumen grande!

El motor para las variantes comerciales del Caddy es el archiprobado y reconocido 2.0 TDI, en versiones de 75 CV (dispomible solo para el Caddy Cargo), 102 o 122 CV, y en el más potente se puede equipar el fantástico cambio DSG de doble embrague. También está prevista la tracción total 4Motion de VW.

Para consultar los precios y los equipamientos, lo mejor es configurar el coche en la web de la marca, pues el precio final “real” depende mucho de las ofertas disponibles en cada momento. La versión de acceso está disponible desde algo menos de 20.000 euros, aunque nuestra recomendación es elegir, como mínimo, el motor de 102 CV.

Volkswagen Caddy para particulares: la mejor alternativa a un monovolumen

Además de las versiones comerciales el Caddy también cuenta con variantes dirigidas a particulares. Pero sus características hacen que muchos aprovechen las cualidades del Caddy para tener un solo coche para el trabajo y para utilizar con la familia. En este caso hablamos de los Caddy Origin, Outdor, Life y California. Todos están dispobibles en versiones corta o larga y con cinco o siete plazas y las puertas que dan acceso a las plazas traseras son siempre correderas. El portón puede ir articulado en el techo, o se puede elegir una doble puerta de apertura hacia los laterales.

 

El modelo de acceso es el Caddy Origin, disponible desde unos 24.000 euros. A partir de aquí puedes ir subiendo equipamiento: el Outdoor con un cierto aire “campero” y el Life con un toque “elegante”. O el Caddy California, la interesante versión camperizada que hará las delicias de los más aventureros, al estar equipada con elementos ara disfrutar del camping: cama abatible, la cocina o la calefacción estacionaria. Pronto le dedicaremos una prueba exclusiva a esta versión.

En este caso, la gama de motores permite elegir entre el 1.5 TSI de gasolina con 115 CV, o el 2.0 TDI, disponible con 102 o 122 CV. Como en las versiones comerciales, se puede equipar cambio DSG de doble embrague y tracción total 4Motion. Y están previstas verisones de GNC e incluso un híbrido enchufable. Por su equilibrio entre prestaciones y consumo, nuestro favorito sería el 2.0 TDI de 122 CV con cambio DSG, aunque tanto el 1.5 TSI como el diésel menos potente mueven al Caddy con soltura.

Al volante del Volkswagen Caddy Outdoor 2.0 TDI DSG

Las sensaciones tras una semana conduciendo un VW Caddy 2.0 TDI DSG en todo tipo de carreteras, e incluso realizando un viaje de fin de semana con el coche cargado. no pueden ser mejores.

Por conducción, presentación interior, sensaciones al volante o posibilidades de equipamiento, estamos ante un coche que podría pasar perfectamente por un turismo, aunque su silueta de “furgo”, o la gran altura disponible hasta el techo cuando te sientas al volante, le delatan. Luego, una vez en marcha, lo que más diferencia al Caddy de un turismo es el ruido. Hay que tener en cuenta que con una “caja” interior tan grande, todo se amplifica, ya sea el ruido aerodinámico, el de la rodadura… Pero en ningún caso es algo preocupante, ni condiciona el confort en una utilización diaria o incluso en un viaje.

Llama la atención el gran espacio disponible, así como la cantidad de prácticos huecos para dejar objetos. Y también las posibilidades de equipamiento no solo de confort, también de seguridad o y multimedia. Poco o nada nada que envidiar al mismísimo VW Golf: hasta 10 sistemas de asistencia a la conducción, incluyendo el Travel Assist, que utiliza una cámara y un radar para mantener el coche en el carril y guardar la distancia con el vehículo que circula delante. Y funciona realmente bien, haciendo muy cómodos los viajes por carretera.

Lo mismo puede decirse de la conectividad, con la pantalla multimedia de hasta 10 pulgadas, compatible con Apple CarPlay y Android Auto. E incluso puedes contar con la magnífica instrumentación digital cockpit, con pantalla de alta resolución de 10,25 pulgadas; una opción que hasta hace bien poco se reservaba a coches del segmento de lujo, aunque la instrumentación convencional analógica es más que suficiente. Nuestra unidad equipaba el techo panorámico, con nada menos que 1,4 metros cuadrados, al que en verano se le puede echar en falta que no disponga de cortinilla.

Mucho espacio, gran confort

En cuanto a las plazas traseras y a la capacidad de maletero, el espacio es, sencillamente, sobresaliente. Los tres asientos de la segunda fila son de las mismas dimensiones, y se pueden abatir o plegarse, e incluso es posible desmontarlos para sacarlos del vehículo. La posición es más sentada que en un turismo, como en los monovolúmenes; incluso hay bandejas plegables en los respaldos de los asientos delanteros. Además, ofrecen distintos reglajes de inclinación del respaldo. El acceso a estas plazas por las puertas deslizantes es muy fácil; no lo es tanto manejar el gran portón trasero articulado en el techo, aunque a cambio deja un enorme hueco de carga.

En marcha, la plataforma derivada del Golf, aquí con suspensiones traseras de nuevo desarrollo adaptadas al Caddy, cumplen de maravilla su difícil función: ofrecer robustez tanto a la hora de transportar grandes cargas o viajar a tope de equipaje y con todas las plazas ocupadas. La dirección ofrece una precisión difícil de encontrar en un vehículo derivado de un comercial, siempre con movimientos de la carrocería muy bien controlados.

El motor TDI de 122 CV es toda una garantía de prestaciones y bajo consumo. En el Caddy se siente más que en el Golf la diferencia en refinamiento comparado con el 1.5 TSI, pero me parece la mejor alternativa, puesto que la versión de 102 CV puede quedarse algo justa si vas a utilizar toda la capacidad de carga que ofrece el Caddy. Eso sí, tampoco descartaría el 1.5 TSI para aquellos que se decidan por un Caddy para uso más particular que profesional y no vayan a realizar muchos kilómetros al año.

Durante nuestra prueba hemos podido comprobar que con el Caddy TDI DSG es posible viajar con consumos de 5,8 l/100 km utilizando el control de crucero a ritmo de autopista.

El precio del Volkswagen Caddy Outdoor parte desde los 26.750 euros con el motor 1.5 TSI de gasolina de 115 CV y cambio manual, desde 28.000 euros con el motor 2.0 TDI de 102 CV, y a partir de 29.180 euros con el 2.0 TDI más potente. El cambio DSG supone un sobreprecio de unos 2.000 euros, mientras que para contar con la tercera fila de asientos y siete plazas hay que desembolsar unos 800 euros.

Galería de imágenes Volkswagen Caddy Outdoor

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