La planta de Mercedes-Benz en Vitoria es una de las fábricas más importantes para la marca de la estrella, ya que es la segunda planta de furgonetas más grande del mundo de Mercedes-Benz Group, con la que lleva nada menos que 68 años cooperando y de la que es dueño integro desde 1981.

Con más de 680.000 m² de extensión, la planta de Vitoria es capaz de producir más de 700 vehículos diarios en sus tres turnos de funcionamiento, posicionándose además como uno de los centros industriales del País Vasco, generando el 4,6% del PIB de la región y el 14% de su volumen de exportación.

Este lunes 11 de abril, se ha producido la salida de la línea de montaje número 1.000.000 de la actual generación de la Vito y el Clase V, siendo concretamente el protagonista, un Mercedes-Benz EQV de color rojo jacinto destinado al mercado alemán.

Un éxito desde sus inicios

Desde su lanzamiento en 1995, la Vito se produce en la planta de Vitoria, llegando a convertirse en 2014 con su tercera generación como líder de su segmento en los principales mercados mundiales, convirtiéndose en un aliado perfecto para las PYME y autónomos, ya que un total de un 70% de sus ventas corresponde a estos perfiles.

En 2019, Mercedes-Benz presentó la versión eléctrica eVito, que permite ofrecer una autonomía de hasta 308 kilómetros con cero emisiones gracias a su nueva batería de 60 kWh, siendo una opción realmente interesante para trayectos o reparto urbano.

Clase V, el referente de su segmento

En el caso del Clase V, Mercedes-Benz define un nuevo concepto de monovolumen con este modelo, por su diseño, su gran habitabilidad y su funcionalidad sin perder el confort, la seguridad y la eficiencia, estando enfocado a aquellos que quieren un vehículo de gran versatilidad pero sin perder las características que definen a la marca de la estrella.

Al igual que su hermana, el Clase V estreno en su gama su primera versión eléctrica llamada EQV en 2019, con más de 350 kilómetros de autonomía y un confort de rodadura excepcional para hasta 8 ocupantes.

Con todo esto, la fábrica de Vitoria impulsa la innovación y la digitalización formando a su plantilla en las últimas tecnologías, colaborando estrechamente con universidades y centros tecnológicos mediante el desarrollo de proyectos y formación a nivel universitario y de FP, y todo ello, sin olvidar su claro objetivo de ser neutral en CO2 para finales de 2022.